¿Cuánta autonomía tiene un coche eléctrico?

Esta es, con total seguridad, una de las preguntas que más se repite entre los usuarios que quieren adquirir un vehículo eléctrico. También, se preguntan cuál es la autonomía de estos coches y qué distancia se puede recorrer con una sola recarga. Hoy es el día en el que sabrás qué autonomía tiene un coche eléctrico y despejar todas tus dudas.

Se ha conseguido que la autonomía de las baterías de los vehículos eléctricos puedan cubrir, sin problemas, distancias cortas como los trayectos en ciudad sin la preocupación de tener que recurrir a estaciones de recarga.

A partir de esta base, se ha logrado que esta tecnología sea mucho más eficiente en grandes distancias sin tener que preocuparnos de recargar las baterías.

En las siguientes líneas, te vamos a hablar de todo lo relacionado con la autonomía de un coche eléctrico: conocerás cuál es su autonomía, de que depende para que dure más la batería y consejos para mejorar el rendimiento de tu vehículo eléctrico.

¿Cómo saber la autonomía de un vehículo eléctrico?

Para determinar cuál es la autonomía de un coche eléctrico, existe una serie de pruebas de ciclo WLTP (Worldwide Harmonized Light Vehicles Test Procedure) en español “Procedimiento Mundial para Ensayos de Vehículos Eléctricos Ligeros”.

Se trata de un protocolo que entró en vigor en el año 2017 y que mide, de una forma realista, el consumo y las emisiones de los coches, sin importar el modelo.
 

2. Peso del vehículo

Muchos conductores no saben cuál es el peso de su vehículo, por lo tanto, ignoran que es uno de los factores más importantes a la hora de conocer el rendimiento máximo que puede tener una batería.

Nota: cuando nos referimos al peso del coche, lo hacemos en base al peso total, con pasajeros y objetos a bordo.

Lógicamente, a mayor peso, la batería necesitará un plus para ponerse en marcha y arrancar, reduciendo la autonomía en carretera del vehículo.

3. Terreno por el que transitemos

El terreno también es otro factor determinante, al tener una influencia muy directa en el esfuerzo que debe utilizar el vehículo. Por lo tanto, queramos o no, el terreno contribuye en un alto porcentaje en la energía que necesite en el momento de desplazarse.

Para que lo entiendas mejor: cuando transitamos por un terreno irregular, normalmente por carreteras de montaña, con pendientes pronunciadas, el coche va a necesitar, si o si, aumentar su potencia, traduciéndose en un elevado consumo de energía, en comparación con la que necesitaríamos para transitar en ciudad.

4. Condiciones climatológicas

Las condiciones del clima son de esos factores con los que no podemos librarnos para determinar el rendimiento de un vehículo.

En este sentido, las baterías, tienen un consumo óptimo de los acumuladores de energía, produciéndose entre los 20 y 40 grados, por lo que, en lugares con condiciones extremas de calor o frío, los intervalos entre una carga y otra pueden ser más cortos.

Como sucede con vehículos convencionales de gasolina o diesel, en temperaturas bajas, el vehículo va a hacer uso de varios elementos que, queramos o no, consumen una importante cantidad de energía.

Los ejemplos más evidentes son la calefacción, las luces, el parabrisas, etc.

¿Cuánto dura la autonomía según la conducción?

Podemos decir que, la autonomía en general de las baterías está en aproximadamente 250 km.

En modelos superiores, como el Volkswagen ID.4 la autonomía de la batería se sitúa en 531 kilómetros, en el Hyundai IONIQ 5 Tech, en los 507 kilómetros y en el modelo de Enya ŠKODA IV entre los 400 y 500 kilómetros.
 

Consejos para optimizar el rendimiento de un vehículo eléctrico

Debido a sus características y mecánica, un vehículo eléctrico no se conduce igual que uno de combustión. Si queremos sacarle todo el potencial que tiene en su interior, debemos tener en cuenta cómo funciona y de qué forma hay que conducirlo para hacer un uso eficiente del mismo.

Sin embargo, adaptarte a este tipo de conducción, es sencillo y no te llevará mucho tiempo acostumbrarte.

Cuando lo hagas, independientemente del trayecto que vayas a realizar, debes tener en cuenta que aprovecharás al máximo la autonomía de tu vehículo si practicas una conducción más eficiente.

Conduce de forma segura, suave, inteligente y sin brusquedades, evitando acelerones y frenadas bruscas.

Controlar el acelerador es crucial, especialmente cuando transitemos por ciudad, cuando las paradas serán una tónica habitual. Utiliza con suavidad el pedal del acelerador y así, reducirás el consumo de energía.

En cambio, para recuperar la energía que hemos invertido y no consumir de más sin necesidad, debes aprovechar al máximo el sistema de frenado regenerativo. Ayuda en gran medida a regenerar la energía que usamos tanto en la frenada, como en la desaceleración para acumular energía en las baterías.

Para finalizar, debemos hacer especial énfasis en el uso adecuado de los sistemas de climatización. No abuses del sistema de calefacción ni del aire acondicionado, trata de mantenerlo siempre entre los 22 y los 24 grados.